Los precios internacionales del petróleo cayeron por debajo de los 100 dólares el jueves 14 de Julio a niveles vistos por última vez antes de que Rusia invadiera Ucrania, mientras los inversores asimilaban una ola de advertencias sobre el estado de la economía mundial.
El petróleo crudo Brent cotizaba a 95,55 dólares poco después de las 10 am un 5 % menos.
La sesión del miércoles marcó el segundo día consecutivo en que el crudo Brent se negoció por debajo de los 100 dólares el barril. West Texas Intermediate también cayó el jueves a poco más de $92 después de cotizar por encima de $96 el miércoles.
Recesión
y las preocupaciones sobre el crecimiento global han pesado sobre los precios del petróleo en las últimas semanas, ya que ambos puntos de referencia han bajado incluso cuando la guerra en Ucrania y las sanciones occidentales contra Rusia continúan estrangulando los suministros de energía a nivel mundial.
El miércoles 13 de Julio , el Fondo Monetario Internacional dijo que recortaría su pronóstico de crecimiento global anual este mes por segunda vez desde abril, ya que una serie de factores de riesgo pesan sobre las economías del mundo. Mientras tanto, un informe de inflación caliente en los EE. UU. tiene a los mercados temiendo que una recesión sea difícil de evitar ya que el Reserva Federal aumenta las tasas de interés para controlar los precios altos.
El informe de inflación del miércoles mostró el IPC de junio en 9,1%, por encima del 8,8% esperado, lo que allana el camino para que la Fed realice una agresiva subida de tipos este mes. El destacado economista Mohamed El-Erian pronosticó el miércoles que la Fed podría aumentar las tasas de interés en 100 puntos básicos para frenar los precios históricamente altos.
“La Fed ahora no tiene más remedio que responder agresivamente”, escribió El-Erian en una columna para el Financial Times. “Es seguro que aumentará las tasas de interés en 0,75 puntos porcentuales a fines de este mes y bien podría considerar un aumento de 1 punto porcentual”.
Mientras tanto, persiste cierta preocupación acerca de que los precios del crudo vuelvan a dispararse, dependiendo de lo que suceda en el exterior. Tal como están las cosas, EE. UU. y la OPEP carecen de capacidad adicional y no podrán aumentar drásticamente la producción para resolver una crisis energética que empeora.
Un analista de Truist predijo que el petróleo podría subir por encima de los precios vistos a principios de este año, a 150 dólares el barril si el crudo ruso desaparece del mercado y no es reemplazado.
“La capacidad rusa se desconecta y creo que se ve un pico potencialmente un 50% más alto antes de fin de año”, advirtió el analista.
